viernes, 9 de abril de 2010

CONDENADO A TRES AÑOS Y MEDIO, POR UN DELITO DE ATENTADO AL AGENTE DE LA AUTORIDAD.
Un hombre acusado de darse a la fuga por varias vías principales de Granadatras saltarse un semáforo en rojo y arrollar en la huida a tres agentes de la Policía Local, que resultaron heridos, ha aceptado en la mañana del jueves tres años y nueve meses de cárcel tras un acuerdo alcanzado entre la defensa y la Fiscalía.
El acuerdo, al que se ha avenido la acusación particular, que pedía para él 29 años de cárcel por los daños causados a los policías, ha supuesto una reducción de la pena de diez años que pedía inicialmente el fiscal, al haberse retirado los delitos de conducción temeraria y los dos de lesiones y uno de falta a los que se enfrentaba el acusado en el juicio previsto en el Juzgado de lo Penal 1 de Granada, que no ha llegado a celebrarse.
El acusado, que está en libertad y tendrá que ingresar en prisión por un delito de atentado, se dio a la fuga el pasado 24 de octubre de 2008 tras saltarse un semáforo en la calle Gran Vía. En la huida no respetó ninguno de los semáforos en rojo que encontró a su paso "con grave riesgo para la circulación", según recalcó el fiscal en su escrito de acusación.
Luego se dirigió hacia la carretera de Armilla, donde había una dotación policial "contra la que intentó embestir", para intentar luego atropellar a un agente en una rotonda. Además, embistió "intencionadamente" contra un vehículo al que causó daños tasados en más de 4.000 euros, acto en el que causó lesiones a un policía.
Reacción
Ya en la zona Norte de la capital, el acusado, Mohamed N.M.C., se introdujo, "dando patadas y puñetazos a los agentes", en un domicilio en el que fue detenido.
La defensa aceptaba los hechos pero aducía problemas psiquiátricos de este hombre, argumento que, según fuentes del caso, no se ha tenido en cuenta en el acuerdo con el Ministerio Público, por el que el procesado resultará condenado, tras la sentencia del juez, por un delito de atentado con un vehículo a motor calificado como "arma peligrosa".
El Ayuntamiento de Granada había retirado la acusación particular que ejercía por haber abonado ya el Consorcio de Compensación de Seguros, declarado responsable civil directo, los 4.297 euros correspondientes a los destrozos causados. Dicho consorcio también ha indemnizado ya a los tres agentes policiales que resultaron heridos con cuantías de unos 6.000 euros.